Escribe Juan Carlos Giordano
Pablo Moyano conformó la llamada Corriente Sindical Federal y Popular. La integran Camioneros, la kirchnerista CTA-Yasky, Micheli (ahora pro-K), Baradel (Suteba), Canillitas (Plaini), Curtidores y otras organizaciones como La Alameda, liderada por Gustavo Vera, ligado al papa Francisco. La Bancaria, conducida por el radical pro-K Sergio Palazzo, finalmente no la integró. Tampoco Juan Carlos Schmidt, el hombre de Hugo Moyano en el ya desaparecido triunvirato de la CGT. Por su parte, los medios informaron erróneamente que la Unión Ferroviaria del Sarmiento encabezada por el Pollo Sobrero es parte de la misma, cuando no es cierto.
Ante la traición de la CGT de los Gordos y los burócratas llamados “Independientes” (Héctor Daer, Gerardo Martínez, Cavalieri, Sasia, Pignanelli, Andrés Rodríguez y otros amigos del ministro Triaca), cualquier trabajador podría preguntarse si esta corriente va a enfrentar de verdad el ajuste de Macri. Los hechos están mostrando que no.
La declaración de fundación de la corriente “político, sindical y social” de Moyano denuncia correctamente “la actitud encubridora de la conducción de la CGT ante la alarmante situación del país”. A su vez, levanta tres principios: “Actuar de acuerdo a las necesidades obreras y populares; identidad para enfrentar en mejores condiciones al gobierno antiobrero y a las patronales, y asambleas de base y paros activos” y convocarían a un acto el 1º de Mayo. (Página12, 8/3). Pero miremos lo que pasó en la gran marcha del 21F: Hugo Moyano nunca mencionó las palabras “continuidad”, “paro general” (como se reclama desde las calles) ni “plan de lucha”. Lamentablemente Hugo y Pablo Moyano dejaron pasar una gran oportunidad el 21F al no convocar a nada. Por eso el sindicalismo combativo marchó con una columna independiente exigiendo paro general y plan de lucha.
Tampoco dijo nada de eso el kirchnerista Yasky. Baradel, del Suteba, después de 48 horas de paro docente no fijó ninguna medida de fuerza, mientras Vidal y Macri siguen con el robo salarial y la campaña contra los maestros.
La nueva corriente encabezada por Pablo Moyano es un reagrupamiento sindical ante el estallido de la cúpula de la CGT para intentar canalizar la bronca contra los dirigentes traidores y el ajuste de Macri. También se explica como parte de los reacomodamientos políticos de dirigentes sindicales que responden a un peronismo en crisis. Pablo Moyano es parte de las autoridades del PJ bonaerense, y el propio Hugo Moyano el 21F insinuó en que hay que votar en 2019 a alguna variante del peronismo, generando ilusiones en que un posible gobierno patronal peronista podría ser la solución.
No depositamos ninguna confianza en estos dirigentes ni en sus discursos antimacristas. Pero como dicen que se oponen a la CGT de los Gordos y que van a “movilizar” contra “el gobierno antiobrero”, les exigimos que pasen de las palabras a los hechos y que convoquen a un plan de movilizaciones y a la preparación de un paro nacional, consultando a los trabajadores en asambleas y plenarios de delegados.
Escribe Miguel Angel Ferreyra Secretario general del Sindicato Aceiteros de Tancacha
Tras cumplir dieciséis días de huelga, los trabajadores de OLCA Sociedad Anónima Industrial y Comercial lograron el reingreso de los dos compañeros despedidos, el inicio del pago de los haberes adeudados y de diferencias salariales acumuladas desde 2015, ya que la patronal no respetaba los aumentos conquistados en los últimos dos años. Todo esto en el marco de una conciliación voluntaria acordada con la patronal.
La convicción cada vez mayor de los trabajadores, junto con el firme cumplimiento de la huelga y la solidaridad de las mujeres, posibilitó que en la audiencia del 6 de marzo se firmara un acta donde la patronal acordó una conciliación voluntaria con los representantes de nuestra federación, en la cual OLCA se compromete entre otros puntos a regularizar los haberes adeudados.
El día miércoles 7 los dos despedidos reingresaron a trabajar junto al resto de las compañeras y compañeros. Ese mismo día cobraron una parte de lo adeudado de enero de 2018 y parte del aguinaldo, con el compromiso patronal de realizar un siguiente pago en siete días.
Esta conciliación voluntaria va a durar 35 días hábiles, plazo durante el cual se continuará en el firme compromiso para alcanzar el objetivo: que se efectivice la reincorporación de los dos despedidos y se cumplan y respeten los derechos laborales en la planta, entre ellos el salario aceitero que con enormes luchas conquistamos.
Nuestra federación tomó este conflicto de forma directa debido a la situación de acefalía en la que se encuentra el sindicato de General Cabrera desde hace un año y medio. En este sentido, se establecerá un cronograma electoral para que los trabajadores, así como han tomado en sus manos la herramienta de lucha que es la huelga, recuperen de igual manera pronta y democráticamente su gremio.
Escribe Graciela Calderón, Secretaria adjunta Suteba La Matanza
La impronta combativa de Baradel, Alesso y demás dirigentes celestes de Ctera y los sindicatos provinciales pareció morir el 6 de marzo. Luego del correcto llamado a parar y movilizar esa semana, su “plan de lucha” quedó en un apoyo a la marcha del 24 de marzo y a un supuesto acto a principios de abril.
Mientras tanto, Baradel reivindica al anterior ministro Bullrich y capitula a la campaña macrista de “negociar con los chicos en el aula, sin tomarlos de rehén”. Llama a un “frente antimacrista”, pero sin un plan de lucha.
En sólo nueve provincias hubo acuerdos dentro del techo salarial impuesto por el gobierno y sin resolver ninguno de los graves problemas. La mayoría del país está en estado de conflicto y varias provincias van a nuevos paros, como Santa Fe, Neuquén, Entre Ríos, Chubut y otras. ¡Es fundamental que CTERA retome el plan de lucha con paros nacionales semanales y movilizaciones que permitan golpear todos juntos contra el ajuste de Macri y los gobernadores!
En Buenos Aires, Baradel y el FUD (Frente Unidad Docente) también aplazaron la lucha, esperando que Vidal “afloje algo”. Pero no es lo que hacen las bases. En San Fernando y Tigre la movilización impidió el cierre de seis escuelas de isla. En Malvinas, José C. Paz, Echeverría, Ezeiza y muchos distritos, los docentes nos autoconvocamos para enfrentar los cierres y despidos. En CABA Ademys también organiza acciones y enfrenta el cierre de los profesorados.
Para pelearle al gobierno es fundamental la unidad y coordinación. Y para arrancarle medidas a Ctera, Suteba/FUD y demás sindicatos, es clave la política y la presión de la oposición multicolor en todo el país.
Impulsamos profundizar la coordinación nacional y provincial, como con los Suteba Multicolores. Lamentablemente la CCC, Rompiendo Cadenas, el PTS y otros grupos ceden a la política del kirchnerismo y la burocracia celeste de “unidad” en un “frente anti-Macri”, no para derrotar en las calles el ajuste sino para prepararnos para “las elecciones de 2019”. El PO, que en sus volantes planteaba desbordar a la burocracia, terminó votando la misma política, dejando en manos de Alesso y Baradel el plan de lucha.
Se niegan a impulsar paros y movilizaciones con o sin la burocracia, cuando ha demostrado ser la mejor manera de presionar para que se tomen medidas de lucha. Llamamos a todas las corrientes y dirigentes combativos a retomar el camino de coordinación nacional y provincial, enfrentando el ajuste de Macri y los gobernadores. Y apostamos a derrotar la política desmovilizadora de la burocracia.
Escribe Claudio Funes
Una impresionante y masiva caravana avanzaba por la avenida Corrientes: eran los trabajadores del INTI reclamando la reincorporación de los 258 despedidos. Ese 2 de marzo la movilización culminó frente al Ministerio de Trabajo, obligando al ministro Jorge Triaca a disponer una reunión entre una delegación de trabajadores y Mauricio Riafrecha, funcionario de su cartera, que reconoció que el conflicto había adquirido “un alto vuelo político”. La lucha tenaz que los trabajadores llevan adelante con múltiples iniciativas, y que cuenta con un gran apoyo popular, ha golpeado al gobierno.
Para continuar pegando con fuerza, durante los días 3 y 4 de marzo se desarrolló un plenario nacional de delegados de ATE-INTI, en el que se resolvió un acampe nacional el 7 y 8 de marzo y concurrir a la marcha por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
El gobierno no logra quebrar la lucha, ni con la complicidad de UPCN, ni con los descuentos confiscatorios, ante los cuales se creó un fondo de lucha. Luego de 40 días, con acampes en 52 centros del país, el conflicto continúa fuerte. Tanto es así que los empresarios ya presionan al gobierno para que normalice el instituto. La paralización del organismo afecta la autorización de automóviles, piezas metalúrgicas y textiles, así como los controles de calidad de pilas, quesos, entre otros muchos casos. ¡En el INTI no sobra nadie, todos adentro!
Gisela es trabajadora ferroviaria del Sarmiento, madre de cuatro hijos y víctima de violencia de género. La empresa Trenes Argentinos la despidió por este motivo, acusándola de “faltadora”. Gisela encabezó la movilización del 8M junto a otras despedidas. Llegó a la marcha con sus compañeras y delegados del ferrocarril llevando en alto carteles con su foto, exigiendo su reincorporación y el cumplimiento de la ley 26.485 de Erradicación de la Violencia hacia las Mujeres que la empresa incumplió al dejarla sin protección y sin trabajo.
El caso recibió un apoyo masivo en las asambleas de mujeres de preparación del 8M y la solidaridad de varios grupos feministas que se acercaron al #Ruidazo en el hall de Once días pasados para exigir su reincorporación. Si logramos ganar esta pelea vamos a estar en mejores condiciones para que en todos los lugares de trabajo se cumpla con la 26.485.
El cuerpo de delegados del Sarmiento está llevando adelante una intensa campaña por su reincorporación. Junto a la Casa que Abraza exigen la implementación de la mencionada ley que sostiene, entre otras cosas, que cuando se notifica un hecho de violencia de género se le deben dar a la víctima todas las herramientas para salir de esa situación. Trenes Argentinos incumple la ley y arroja a Gisela a una situación de total desprotección y vulnerabilidad. Isadora acompaña este reclamo y exige su inmediata reincorporación.