Escribe Mercedes Trimarchi Diputada electa Izquierda Socialista y dirigente de Isadora

En una jornada histórica, miles de mujeres logramos que la Cámara de Diputados vote la media sanción de la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Muchos diputados se dieron vuelta a favor del sí ante la marea verde que rodeó el Congreso. El Frente de Izquierda es el único bloque que votó por unanimidad la ley y sin fisuras. Desde Isadora e Izquierda Socialista compartimos algunas conclusiones de esta gran jornada y llamamos a seguir movilizadas para que el aborto sea ley.

El Frente de Izquierda fue noticia en la pelea por el aborto. Y lo fue porque mostró convicción y coherencia política. Ante el desbarranque de diputados de un mismo partido votando distinto, el Frente de Izquierda sobresalió. Para nosotros, esto no es ninguna novedad. Es nuestra conducta. Tenemos en nuestro programa el aborto legal y peleamos todos los días por ello. Es por lo que juran nuestros diputados: “apoyar las luchas obreras, populares y de la mujer”. Luchamos contra la opresión y explotación que sufren las mujeres bajo este capitalismo patriarcal y lo hacemos llevando estos reclamos contra los gobiernos de turno.
En todas las campañas electorales, cuando muchos no hablan del tema o especulan sobre si decir algo sobre el aborto les puede hacer perder votos, la izquierda lo plantea abiertamente, da la cara, y lo hace valer en cualquier lugar de su actuación.

De 107 diputados que integran el bloque de Cambiemos -PRO, UCR y Coalición Cívica-, 65 lo hicieron en contra del proyecto, poniendo en peligro el éxito de la votación. Es decir, el 61% del bloque oficialista, la mayoría, lo hizo de manera negativa. Siempre estuvieron en contra Vidal, Michetti, Triaca, Marcos Pela y otros capitostes. También el Frente para la Victoria, Frente Renovador, PJ y partidos provinciales como Córdoba Federal, el Movimiento Popular Neuquino y otros, votaron en contra. Gioja del Frente para la Victoria, coincidió en su voto negativo con Elisa Carrió. Diego Bossio, ex kirchnerista, aportó su voto negativo en nombre del PJ, como también lo hizo Baldassi, del PRO cordobés, lo mismo que los massistas Graciela Camaño y Marco Lavagna. Claudia Zamora, del Frente Cívico por Santiago y el formoseño kirchnerista Gustavo Fernández Patri, tampoco acompañaron a las mujeres en lucha.

Después del triunfo del plebiscito en Irlanda, la media sanción que obtuvo el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo en la Argentina resultó otra gran noticia que entusiasma y fortalece la pelea de las mujeres en el mundo.
El aborto legal, una reivindicación que empezó a tomar fuerza y obtuvo su primera serie grande de triunfos a comienzos de la década del ’70 –con los logros de Italia, España y otros países europeos–, da ahora un nuevo salto, con los avances alcanzados nada más ni nada menos que en dos de los países donde la Iglesia Católica tiene más poder.

En varios países se realizaron acciones solidarias con la pelea de las mujeres argentinas. En Paraguay, el martes 12 de junio se realizó una concentración en la embajada argentina para expresar el apoyo a esta lucha. El 13 de junio, las brasileras impulsaron una actividad frente al consulado argentino en Río de Janeiro. En Barcelona, impulsadas por las compañeras de Lucha Internacionalista-UIT/CI, se realizó una concentración en el consulado argentino con decenas de activistas al grito de “si no hay aborto legal, que kilombo se va a armar”.